Aluminio, Plomo y Mercurio en niños con autismo

Existe una relación entre las infecciones crónicas y la retención de metales en los cuerpos de los niños con autismo.

Los metales se encuentran secuestrados por virus y bacterias, es por esto que realizar una desparasitación enfocada en virus y bacterias, durante el tratamiento de los niños impacta directamente en los contenidos de metales. Algunos de los ejemplos de la reacción que los metales pueden generar en conductas o procesos bioquímicos del cuerpo son:

El Plomo y el Mercurio, inhiben la dopamina, también llamada la “hormona de la felicidad”. Esta se convierte en noradrenalina, los bajos niveles de noradrenalina producen que el cuerpo no regula la atención, el enfoque y se tenga niebla mental.

Incluso en adultos provoca fatiga crónica.

El Plomo interfiere en la síntesis de hemoglobina, proceso por el que se transporta oxígeno de los pulmones a tejidos y órganos.

El plomo interfiere con la producción de proteína GAD, que convierte el glutamato en GABA

El GABA, es clave para el habla, y depende del correcto balance entre el aminoácido glutamato y el GABA un neurotransmisor. Ambos influyen en la reducción de muchos de los síntomas de los niños con diagnóstico.

Algunos de estos síntomas son aleteo de las manos, dar vueltas o alinear juguetes u objetos, las ecolalias, la persistencia o repetir frases de memoria.

El Mercurio

Puede pasar al cuerpo como mercurio orgánico a través de la cadena alimentaria y entrar en el cerebro , causando temores y alteraciones del comportamiento. En Alemania, el ácido alfa lipoico, es empleado como un desintoxicador de metales, mezclado con el glutatión para el tratamiento del mercurio. El aluminio inhibe la producción de acetilcolina, una sustancia que sirve para enviar mensajes a las células nerviosas, musculares y glandulares, como la glándula tiroides, otra acción afectada por el aluminio es el ciclo de Krebs, una ruta metabólica que forma parte de la respiración de las células.

Bajo ciertas condiciones el aluminio también inhibe la producción de BH 4 que es un ancla para el desarrollo del lenguaje. El BH4 es un cofactor de enzimas como la fenilalanina, la tirosina y el triftófano, lo que causará un defecto en la producción de neurotransmisores.

Si estás interesado en saber los niveles de metales pesados como Aluminio, plomo y mercurio, y aplicar un tratamiento en IG Lab, podemos apoyarte.

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REFERENCIAS:

The Effect of Lead Exposure on Autism Development

Aanya Goel 1, Michael Aschner 1

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33561959/

Mercury as a hapten: A review of the role of toxicant-induced brain autoantibodies in autism and possible treatment considerations

Janet K Kern 1, David A Geier 2, Jyutika A Mehta 3, Kristin G Homme 4, Mark R Geier 2

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32534375/

Role of metallic pollutants in neurodegeneration: effects of aluminum, lead, mercury, and arsenic in mediating brain impairment events and autism spectrum disorder

Ishnoor Kaur 1, Tapan Behl 2, Lotfi Aleya 3, Md Habibur Rahman 4 5, Arun Kumar 1, Sandeep Arora 1, Rokeya Akter 4